OTOÑO EN EL BARRANC DEL CARRAIXET

9/10/2013
Barranc de  Carraixet, Alboraia.

 Port Saplaya, Alboraia


Amanece en Port Sapalya con nubes en el mar, una garceta común (Egretta garzetta) pesca junto al espigón mientras en su punta varios pescadores están absortos en sus cañas.  
En el mar liso como un papel solo se observan las siluetas de dos gaviotas patiamarilla (Larus michahellis) mientras un charrán patinegro (Thalasseus sandvicensis) se zambulle en pos de un pez mínimo.

Garcilla cangrejera (Ardeola ralloides)

Entro en el barranco por su desembocadura a diferencia de los gorriones comunes (Passer domesticus) que tras un corto vuelo se refugian en las casetas prefabricadas destaca un carricero común (Acrocephalus scirpaceus) que prefiere esconderse unos segundos entre el carrizo, puede que aún se quede unos días más al amparo de estos días de otoño tan benignos antes de migrar al sur.

 Barranc del Carraixet, Alboraia


Tras el muro carrizo se abre un claro justo bajo el puente de la autovía, allí afea el lugar una necesaria manga flotante para evitar que los residuos sólidos vayan al mar, el problema es que no se retiran. Allí se acumulan unas 30 focha común (Fulica atra) y 15 gallineta común (Gallinula chloropus) de todas las edades. Las primeras tras una corta zambullida emergen con plantas en sus picos, las segundas aparentan buscar recursos varios de entre todo lo que flota.

Garcilla cangrejera (Ardeola ralloides)


Me llama la atención una garcilla cangrejera (Ardeola ralloides) anillada (5127 aparenta poner en el brazalete metálico) que no se preocupa de mi presencia y la tomo como objetivo, me acerco dando un rodeo hasta que consigo sentarme en un banco a la orilla, apenas a 8 metros de distancia. Durante la siguiente  media hora me dedico a fotografiarla y observarla. Está sobre la manga flotante, inmóvil con la mirada fija en el agua, está atenta a los pececillos que muy cerca de la superficie se dedican a comer compulsivamente. Cada poco su cuello se lanza como arpón y sale con un mínimo bocado que traga rápido, se desplaza con parsimonia dos o tres pasos y vuelve a colocarse en posición de disparo. Así recorre de derecha a izquierda unos 6 metros de flotador. Solo aparenta distraerse cuando las gallinetas se le acercan mucho, entonces se aleja o para mirarme unos segundos y comprobar que no aparento una amenaza. El único color chillón lo aporta un macho de lavandera boyera (Motacilla flava).

Continúo barranco arriba y compruebo que hay una buena concentración de fochas, no bajaran de los 250 ejemplares, todavía no ha llovido y el resto de marjales costeros tienen poca agua. Entre ellas algún zampullín común (Tachybaptus ruficollis) y alguna gaviota reidora (Chroicocephalus ridibundus).

 Focha común (Fulica atra)


Aguas arriba el carrizo se apodera del lecho del barranco y solo queda una pequeña lámina de agua abierta, allí observo ánade real (Anas platyrhynchos) y un calamón (Porphyrio porphyrio). Sobrevolando golondrina común (Hirundo rustica) aprovechando los abundantes mosquitos, jilgueros (Carduelis carduelis) en un bando con no menos de 20 individuos, una curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala) macho y varios ruiseñor bastardo (Cettia cetti‎). En los tendidos eléctricos la omnipresente tórtola turca (Streptopelia decaocto) y en los campos en barbecho alguna lavandera blanca (Motacilla alba).

 Calamón (Porphyrio porphyrio)


Al llegar al ecuador de mi recorrido en el puente de la carretera de Alboraia a Port Saplaya encuentro la habitual colección de azulones acompañados de anátidas escapadas o abandonadas. Desde el 2007, según mis registros, un macho de pato mandarín (Aix galericulata) que se ha cruzado con pato doméstico y tiene varios hijos extraños por la zona, los patos criollos (Cairina moschata) que desde la pareja inicial del 2007 tras varias puestas ya son un grupo de 9 ejemplares y los más recientes del año pasado, dos gansos (Anser anser domesticus). De regreso cierran la mañana otro bando de aves exóticas, en este caso 8 cotorritas gris (Myiopsitta monachus), otras aves ya aclimatadas desde los años 90 y en plena expansión.



Pato mandarín (Aix galericulata) 

 Cotorrita gris (Myiopsitta monachus)