ADEMUZ, RECTA FINAL AL INVIERNO



Los días 2 y 9 de marzo he realizado dos jornadas de censo invernal en el Rincón de Ademuz, en el extremo occidental de la provincia de València, en concreto en los términos de Castielfabib y Vallanca. Poca densidad y variedad de aves, apenas una treintena por lo elevado de la zona que supera con creces los 1000 metros sobre el nivel mar y por tanto un lugar con un acusado clima continental.

 El Macarrón.

Como resumen de estas dos jornadas quiero hacer un recorrido por zonas diferenciadas. De mayor a menor altitud empezaré por la zona de El Macarrón, un altiplano a 1190 metros de altitud, reino de tierras arenosas con ralo matorral espinoso salteado de alguna sabina de bajo porte. Terreno de pastos primaverales que esconde a la mejor población valenciana de alondra ricotí (Chersophilus duponti). Sus poblaciones en todo el País Valencià se ciñen al Rincón de Ademuz, siempre han sido escasas y según los últimos estudios parece que están en clara regresión: 

- Benedicto Campos en 2003 estimó entre 82-101 machos cantores. 

CAMPOS, B. 2003. Censo de las Poblaciones Reproductoras de Sisón Común Tetrax tetrax,
Ganga Ortega Pterocles orientalis y Alondra de Dupont Chersophilus duponti en la Comunidad
Valenciana. Consellería de Territorio y Vivienda, Generalitat Valenciana. Valencia.


- En 2007 Cádec localizó 98 machos, trabajo comentado por Toni Alcocer en el FORO SVO AVES ya que participo personalmente en esos censos.

CÀDEC. 2007. Censo de la Población de Alondra Ricotí (Chersophilus duponti) en la Comarca del Rincón de Ademuz. Consejería de Territorio y Vivienda. Generalitat Valenciana. Informe Inédito.

- En 2010 Garza y Suarez bajaron su estima a entre 53 y 62 machos.


GARZA, V. and SUÁREZ, F. 1990. Distribución,población y selección de hábitat de la alondra de Dupont (Chersophilus duponti) en la Península Ibérica. Ardeola, 37: 3-12.

- Por último Cristian Pérez-Granados y Germán López trabajan con una población de 44-47.

Pérez-Granados, C., López Iborra, G. M. 2013. CENSO DE AVES REPRODUCTORAS Y TENDENCIA POBLACIONAL DE LA ALONDRA RICOTÍ (CHERSOPHILUS DUPONTI) EN ESPAÑA ORIENTAL.
Ardeola 60(1), 2013, 143-15 Ardeola 60 (I), 2013, 143-150.

Estos mismos autores publican un análisis que demuestra la acusada reducción de las Ricotís para el periodo 2005-2013 QUERCUS nº337 pp 19-25 Cristian Pérez-Granados y Germán Manuel López Iborra. Cristian también ha aclarado en el FORO SVO AVES algunas dudas planteadas por la disparidad de resultados de los distintos censos así como las metodologías empleadas en sus trabajos.

Por último no quiero olvidar mencionar a otro gran conocedor de la especie Germán Francés, el Forestal de Ademuz, al que miembros de la SVO estaremos siempre agradecidos ya que gracias a él tuvimos nuestro primer contacto con esta especie y que ahora se ha ofrecido a contrastar la abundancia de una nueva población para la Dupont en Los Santos, que localicé durante los trabajos para el Atlas realizados durante la primavera de 2013.

Yo sin hacer un censo exhaustivo en El Macarrón he localizado 10 machos cantores, a los que sumar 2 más en El Pinar, pegados al límite provincial aunque ya en la parte de Cuenca y otro macho más en Las Toscas, Los Santos.

Quiero invitaros a descubrir el canto de esta joya de nuestra fauna ibérica en:



Perdiz roja (Alectoris rufa).


En estos páramos acompañan a la ricotí otras especies como la cogujada montesina (Galerida theklae), el pardillo común (Carduelis cannabina) todavía en bandos invernales, algunas parejas de perdiz roja (Alectoris rufa) emparejadas, trigueros (Miliaria calandra) cantarines para marcar sus territorios, curruca rabilarga (Sylvia undata) y cuervos (Corvus corax). A estas especies hay que añadir la presencia de un juvenil de un año de águila real (Aquila chrysaetos) que encontré la mañana del día 2, posado en lo alto de una pequeña sabina oteando la llanura.


 El Hontanar, Castielfabib.


El valle por el que serpentea la N-420 subiendo dirección Cuenca está coronado por la aldea en ruinas del Hontanar, entre campos de cereal todavía trabajados y con los brotes verdes despuntando debajo de los hielos que dejan temperaturas de -4ºC como las del día 2 de marzo. Aquí dan riqueza al ecosistema algunas fuentes y reatos que aprovechan para crecer algunos chopos, en las laderas encuentran resguardo y humedad sabinas de mayor porte a las que se añaden pinos y alguna carrasca de buen porte. Gracias a esta diversidad aquí se han dejado ver estos días alcaudón meridional (Lanius meridionalis), carbonero común (Parus major), escribano montesino (Emberiza cia), herrerillo común (Cyanistes caeruleus) y pinzón vulgar (Fringilla coelebs).

 Tóvedas de Arriba y al fondo El Cabezo, 1.448 m.s.n.m.

Otro valle más pequeño discurre paralelo al anterior, al sur, es el de Tóvedas. Muy similar pero más recóndito con las laderas cubiertas de espesos pinares y en las partes más húmedas a los chopos se les unen almendros y enormes nogueras cultivadas, en la solana reinan monumentales sabinas. Dos caseríos le dan nombre al valle y se diferencian por la orientación este-oeste, Tóvedas de Arriba y Tóvedas de Abajo. Este rincón ya me ha deparado alguna sorpresa como la presencia del escaso escribano hortelano (Emberiza hortulana) y una pareja de busardo ratonero (Buteo buteo).


 Escribano hortelano (Emberiza hortulana)


Desde Tóvedas de Abajo un estrecho desfiladero comunica con Ademuz, un antiquísimo sendero  tallado en la piedra y en el que a tramos todavía se distinguen los canales labrados por las rodaduras de los carros. En el estrecho otro indicio del final del invierno una pareja de escribano montesino (Emberiza cia) con el macho llevando material para el nido, algún mirlo común (Turdus merula), verdecillos (Serinus serinus) y verderones (Carduelis chloris). El congosto gira al sur y pierde su nombre de barranco de Tóvedas para rebautizarse como barranco seco. Pero sus aguas han tallado el terreno y han dejado unos buenos cortados con abundantes cuevas. No pude observar ninguna rapaz pero hay abundantes excremento posiblemente de buitre leonado y algún nido viejo.

 Sabina monumental de Tóvedas de Abajo.


Volviendo a Tóvedas de Arriba encontramos la parte alta del barranco de Tóvedas que nace a los pies de una de estas cumbres, el Cabezo con 1.448 metros. Esta parte es la más frondosa, cubierta de espesos pinares en los que también hay cortados susceptibles de aumentar la lista de especies. Una pista olvidada une la N-420 con Vallanca y permite adivinar nuevos rincones que explorar en busca de las aves de este rincón olvidado que seguro me deparará muchas sorpresas cuando empiecen a llegar las especies estivales.

  


 Corral y restos de apicultor abandonados en la Loma del Losar.

 Vallanca.


 Chozo en El Pinar, Vallanca.

Texto y fotos de Rafa Muñoz. 2014.