Las Hoces del Duratón

 

Águila real

7 de septiembre de 2024

Esta jornada mi objetivo era recorrer las hoces que abre el río Duratón entre las localidades de Sepúlveda y Burgomillodo. 


Río Duratón


Esta zona horadada por el afluente del Duero fue declarada parque natural en 1989 con el objetivo de proteger la mayor colonia de cría de buitre leonado de toda Europa, sobre un total de 5.037 ha.


Hoz del Duratón


Por la mañana realicé la senda que parte del parking cercano al Puente de Talcano, muy cerca de Sepúlveda y que llega hasta el puente de Villaseca, para volver por el mismo camino. Este recorrido se hace por el fondo del valle, siguiendo en paralelo el curso del río. 


Senda entre puentes del Duratón


Esta ruta está restringida durante el periodo de reproducción para garantizar la necesaria tranquilidad de las aves rupícolas.


Buitre leonado juvenil


Esa jornada además de los buitres leonados (Gyps fulvus) pude observar: águila real (Aquila chrysaetos homeyeri), ardilla roja (Sciurus vulgaris), arrendajo euroasiático (Garrulus glandarius), chova piquirroja (Pyrrhocorax graculus), colirrojo real (Phoenicurus phoenicurus), corzo (Capreolus capreolus), cuervo grande (Corvus corax), curruca capirotada (Sylvia atricapilla), grajilla occidental (Corvus monedula spermologus), herrerillo común (Cyanistes caeruleus), paloma zurita (Columba oenas), papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca), pito ibérico (Picus sharpei), roquero solitario (Monticola solitarius), ruiseñor común (Luscinia megarhynchos) o zorzal charlo (Turdus viscivorus).


Buitres leonados
 

La Ermita de San Frutos “de los Buitres”

Ermita de San Frutos


Por la tarde cogí el coche para acercarme a esta coqueta ermita románica, situada en lo alto del acantilado junto a un meandro. Una vez allí los ojos del naturalista tienen que elegir entre seguir el vuelo de los buitres que pasan a pocos metros de la cabeza o recrearse con las elegantes piedras del priorato de San Frutos que se levantaron en el siglo XII sobre un templo visigodo del siglo VII. 

 

Zorzal charlo

Texto y fotos de Rafa Muñoz, Arxiu RMiB


Hoz del Duratón

Refugio de Montejo y Hoces del Riaza

 

Hoz del Riaza

6 de septiembre de 2024

En 1974, gracias al impulso de Félix Rodríguez de la Fuente así como del WWF España que entonces se llamaba ADENA, se creó el Refugio de Rapaces de Montejo. El relevo en la dirección de este espacio natural lo tomó el doctor Fidel José Fernández y Fernández-Arroyo en 1983 que dirigió e impulsó hasta su fallecimiento en 2022. Esta fue la primera experiencia española de custodia compartida, este sistema favorece acuerdos entre los propietarios i asociaciones conservacionistas para hacer una gestión que garantice la protección de espacios naturales. 


Refugio de Rapaces de Montejo


En medio de la meseta la erosión del río Riaza ha excavado un valle donde se refugian una gran variedad de aves rupícolas, principalmente los buitres de leonados (Gyps fulvus), además del alimoche (Neophron percnopterus). En 2004 se amplió este espacio protegido gracias a la declaración del parque Natural de las Hoces del Río Riaza que en sus 5.185 ha engloba el Refugio de Montejo.


Buitre leonado


Desde la localidad Montejo de la Vega de la Serrezuela, siguiendo la calle de la Cruz por una pista en perfecto estado se llega al aparcamiento de la Hoces. Allí empieza la senda circular de Entre Puentes que es de siete kilómetros. Es aconsejable prolongarla empalmando con la senda de la Ermita del Causar y una vez llegar al templo regresar hasta el parking, esto añade 5 km más pero permite acercarnos a unos cañones espectaculares.


Ruta propuesta

 

Este lugar bulle biodiversidad, una vez llenas tu mirada del omnipresente y masivo buitre leonado aprendes a encontrar otras especies como fueron el águila calzada (Aquila pennata), águila real (Aquila chrysaetos homeyeri), aguilucho lagunero occidental (Circus aeruginosus), alcaudón común (Lanius senator), alcaudón meridional ibérico (Lanius meridionalis meridionalis), alimoche común (Neophron percnopterus), avión roquero (Ptyonoprogne rupestris), busardo ratonero (Buteo buteo), cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), cetia ruiseñor (Cettia cetti), cogujada común (Galerida cristata), collalba gris (Oenanthe oenanthe), corneja negra (Corvus corone), culebrera europea (Circaetus gallicus), curruca capirotada (Sylvia atricapilla), curruca rabilarga (Curruca undata), escribano montesino (Emberiza cia), grajilla occidental (Corvus monedula spermologus), herrerillo común (Cyanistes caeruleus), milano negro (Milvus migrans), roquero solitario (Monticola solitarius), terrera común (Calandrella brachydactyla), trepador azul (Sitta europaea caesia) o corzos (Capreolus capreolus).

 

Maderuelo, Arco de la Villa

Maderuelo una villa medieval

Por la tarde aproveché para conocer el pueblo medieval de Maderuelo. Esta localidad medieval fue repoblada por Fernán González a mediados del s. X. Sigue conservando parte de las murallas que protegían la localidad ubicada en lo alto de un peñasco de la Sierra de Pradales, que bordea el curso del río Riaza. 

Puerta del Arco de la Villa de Maderuelo


En la entrada de la villa destaca el Arco de la Villa que soporta una de las cuatro puertas de la fortaleza. Aún hoy se conservan los cerrojos, la poterna o puerta menor y las gruesas puertas principales de madera acorazada, con adornos, policromía y blindaje del siglo XV. Nada más acceder al recinto urbano nos tropezamos con la Iglesia Palacio de San Miguel, que se construyó aprovechando la parte de la muralla. 

Picota de Maderuelo


Otro punto singular se encuentra en la plaza principal, frente a la Iglesia de Santa María del Castillo, donde llama la atención una picota o rollo de justicia. Se trata de una columna donde se encadenaba a los reos para escarnio público, pero no es histórica, se creó como attrezzo para el rodaje de la serie televisiva Tierra de Lobos, que dirigió Jorge Torregrosa para Boomerang TV en 2010. 


Vista desde el Mirador de los Templarios


Para finalizar una recomendación, no dejéis de visitar el restaurante-bar-terraza, el Mirador de los Templarios, tiene unas vistas espectaculares, una decoración singular de tallas de madera y como guinda, su propietario pone una música sorprendentemente buena y original. 


Busardo ratonero


De regreso a Riaza, atravesando las localidades de Fuentemizarra y Campo de San Pedro, pude fotografiar alguno de los innumerables ratoneros (Buteo buteo) y milanos negros (Milvus migrans) que gustan posarse en lo alto de los postes telefónicos que hay junto a la carretera.


Milano negro
 

Fuentes y referencias:

Refugio de Montejo:

https://www.wwf.es/nuestro_trabajo/refugio_de_montejo/

 

Texto y fotos de Rafa Muñoz, Arxiu RMiB

Sierra Norte de Guadalajara y Tejeda Negra

 

Hayedo de Tejeda Negra

En mi deseo de conocer los mejores rincones naturales de iberia había un enorme hueco, nunca encontraba el momento apropiado para conocer la naturaleza y el románico de la Sierra Norte de Guadalajara, además de las vecinas hoces segovianas. A principios de septiembre encontré el momento apropiado para escaparme en solitario, mi principal objetivo era conocer tres espacios naturales muy importantes: las Hoces del Duratón, las de Montejo y Riaza, así como Tejeda Negra.

 

Nuestra Señora de la Asunción (s. XIII)

4 de septiembre de 2024

Sierra Norte de Guadalajara, Tamajón

La puerta de entrada sur a la Sierra Nortes de Guadalajara es la localidad de Tamajón, donde no se puede obviar una visita a la elegante la iglesia románica de Nuestra Señora de la Asunción (s. XIII).

 

Ciudad Encantada de Tamajón

Ciudad Encantada de Tamajón

A pocos metros, siguiendo la GU-186 en dirección norte se encuentra un precioso bosque mixto de enebros (Juniperus oxycedrus), encinas (Quercus ilex) y sabinas albares (Juniperus thurifera). Los añosos pies crecen rodeados de enormes piedras calizas que han ido esculpiendo la erosión. 


Rabilargo ibérico


Entre la avifauna que pude observar destacar la presencia de tres rabilargos ibéricos (Cyanopica cyanus), además de arrendajos (Garrulus glandarius), buitres (Gyps fulvus) o herrerillo capuchino (Lophophanes cristatus). Muy cerca se encuentra la Ermita de la Virgen de los Enebrales (s. XVI). En los alrededores hay extensos bosques de roble melojo (Quercus pyrenaica) y allí mismo intenté fotografiar sin éxito una esfinge colibrí (Macroglossum stellatarum) que no paró quieta un segundo.

 

Roblelacasa

Los pueblos negros

De nuevo siguiendo la GU-186 dirección norte se alzan unos pequeños pueblos que por su tradicional aislamiento geográfico han creado un universo propio, los Pueblos Negros. Se despliegan al amparo del pico Ocejón (2.049 m) y tienen muy cerca el pico del Lobo (2.274 m) que es la mayor altura de la Sierra de Ayllón y de toda Castilla la Mancha.


Campillo de Ranas


Estas localidades situadas a una altura media de 1.500 m se caracterizan por una tipología constructiva basada en la pizarra unida por mortero, una pasta resultante de la mezcla de barro, arcilla y paja. Estos materiales tintan los edificios de un tono negruzco característico que bautiza a esta comarca. Otra de las peculiaridades son los tapiales de piedra seca que delimitan prados y huertos. Aquí utilizan una técnica peculiar que consiste en amontonar lascas de pizarra en horizontal que alternan armoniosamente grandes losas de pizarra plantadas en vertical, sobresaliendo de la altura media del muro.


Bolera en Roblelacasa


La cabeza comarcal es Campillo de Ranas que solo mantiene 155 vecinos (INE en 2023). Los escasos recursos que proporcionaban estas duras tierra no dan para mantener más población. La actividad económica se basaba en el cultivo del trigo tranquillón, centeno, patatas, legumbres y verduras que complementaban con la cría ganado merino y cabrío. Además se practica una caza de subsistencia basada en la perdiz, el conejo y la pesca de trucha. Hasta 1826 estos valles pertenecían a Segovia y formaban parte de la Tierra de Ayllón. 

Argynnis paphia


Otro de las localidades pintorescas que vale la pena visitar es Roblelacasa. Tras la reconquista y repoblación, entre los siglos XII y XIII, los diferentes núcleos de población construyeron sobrias y pequeñas iglesias tardo-románicas. Otra de las peculiaridades de esta zona son las canchas de bolos que tienen un espacio principal en medio de las principales localidades. Estas tierras quedaron protegidas por la Reserva Natural del Macizo del Lobo-Cebollera que en 2011 se amplió y formaron parte del parque natural de la Sierra Norte de Guadalajara que sumó un total de 117.898 ha.

 

Águila real

Puerto de la Quesera

Unos metros antes de llegas a Majaelrayo, a mano izquierda sale un camino con un asfaltado pésimo que conduce al Puerto de la Quesera (1.712 m) y poco después llega a Riaza. En total es un recorrido de 41 km en medio de bosques y barrancos, un desierto verde libre de toda presencia humana. El firme es tan precario y la carretera tan estrecha que en periodo invernal la cierran al tránsito rodado. Esta ruta atraviesa un inmenso bosque prístino en el que pude observar águila real (Aquila chrysaetos homeyeri) y alcotán europeo (Falco subbuteo).

 

Riaza

Riaza

Una vez coronado el puerto se entra en la provincia de Segovia y la carretera mejora el firme, aunque sigue siendo estrecha y revirada. En la parte alta destaca la presencia de un pequeño bosque, el hayedo de la Pedrosa. Las hayas se abren paso en medio de un vasto robledal de rebollo que llega casi hasta la misma Riaza. Esta localidad que fue fundada durante la reconquista entre los siglos XI y XII ha sabido convertirse en un importante centro turístico, dotado de restaurantes y alojamientos por lo que decidí utilizarlo para pernoctar las cuatro noches que duró mi escapada. Dentro del casco urbano sorprende la arquitectura de su plaza mayor porticada que en fiestas aprovechan para llenarla con una gran plaza de toros portátil.


Senda Carretas de Tejeda Negra

 

5 de septiembre de 2024

El Hayedo de Tejeda Negra

El Parque Natural del Hayedo de Tejera Negra se encuentra situado al noroeste de la provincia de Guadalajara, en la vertiente sur del macizo de Ayllón, perteneciendo al Sistema Central. En 1974 fue declarado Sitio Natural de Interés Nacional y en 1978 se convirtió en parque natural. Está incluido en la Red Natura 2000 y está calificado como “Zona de Especial Protección para las Aves” (ZEPA) y “Lugar de Interés Comunitario (LIC)”. Protege una superficie de 1.641 hectáreas donde crecen bosques de hayas, el pino silvestre y rebollares ayllonenses. Su principal singularidad radica en los hayedos, ya que este árbol es característico de montañas húmedas más norteñas, como la cantábrica o la pirenaica, aquí se refugia el hayedo más sureño del oeste europeo, que se extiende sobre unas 400 hectáreas. 


Pinar en Tejeda Negra


Este bosque relicto fue talado a mata rasa en 1860 y 1960, por ello la mayoría de los pies actuales son relativamente jóvenes y proceden del rebrote de los tocones de árboles talados, aunque en algunos rincones se salvaron ejemplares que hoy deben pasar de los 300 años. La característica climática más transcendente de este enclave, además de su elevada precipitación (1.000 mm de lluvia al año) es que también tiene veranos húmedos, algo impensable en estas latitudes. En el estío son frecuentes las tormentas y los días de niebla que aportan y mantienen una la elevada humedad ambiental que permite la supervivencia del hayedo. Respecto de las temperaturas, los veranos son suaves y frescos mientras que los inviernos son fríos y duros, con frecuentes nevadas.


Senda Carretas


Esa mañana hice la Senda de Carretas aprovechando que había disponibilidad en el cupo de acceso. En otoño este bosque se viste de unos colores espectaculares y lo convierten en un lugar muy concurrido, por tanto el final del verano tiene la ventaja ser una época mucho más tranquila lo que facilita observar su biodiversidad. Se trata de un recorrido circular de 6 km contados a partir del aparcamiento que no tienen ninguna dificultad, si exceptuamos que entre la Carbonera y Matarredonda hay que salvar una pendiente pronunciada, pero el resto del camino va perdiendo altitud siguiendo una pendiente suave.


Curruca zarcera


Esa mañana como más reseñable indicar la presencia de curruca capirotada (Sylvia atricapilla), curruca carrasqueña occidental (Curruca iberiae) y curruca zarcera (Curruca communis). Mosquitero musical (Phylloscopus trochilus trochilus), papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca), pico picapinos (Dendrocopos major), pito ibérico (Picus sharpei), reyezuelo listado (Regulus ignicapilla) y lagarto verdinegro (Lacerta schreiberi).

 

Santa Coloma de Albendiego

El Románico de Santa Coloma de Albendiego

Por la tarde me acerqué hasta la pequeña ermita románica del siglo XII donde destacan las celosías del ábside que tienen clara influencia mudéjar.

 

Sierra de Pela

La Sierra de Pela

De regreso a Riaza donde me alojaba, utilicé la CM-110 donde, nada más pasar la localidad de Somolinos me sorprendió la belleza geológica de la Sierra de Pela que complementa una laguna.

 

Ayllón

Ayllón

Como todavía quedaban horas de luz me acerqué a esta localidad que cuenta con poco más de 1.000 habitantes y está considerada como uno de los pueblos más bonitos de España. Como principal atractivo destaca su plaza porticada que está sembrada de edificios señoriales, demostrando la riqueza que generó la ganadería bovina para sus vecinos.


Mosquitero musical


Texto y fotos Rafa Muñoz

Las montañas del agua

Papamoscas cerrojillo


Para huir de los calores a orillas del Mediterráneo hicimos una escapada a las montañas del Agua. En la parte sur-occidental de la cordillera Ibérica se encuentra la Sierra de Albarracín, también conocida como los Montes Universales a partir de 1850, según el Diccionario de Madoz. Se cree que los denominaron universales porque eran comunales. En ellos crecen buenos bosques de pino albar, robles, sabinares y enebrales. Estas montañas tienen una longitud de 60 km desplegada en dirección noreste-sureste, sobre el límite suroeste de Teruel, el noreste a Cuenca y el sureste a Guadalajara. Su cota máxima es el pico Caimodorro que se encuentra en el término de Orihuela del Tremedal y cuenta con 1.936 m de altitud. La peculiaridad de estas montañas calcáreas es que aunque tienen unas alturas y una extensión modesta acogen el nacimiento de ríos muy importantes para buena parte de la península ibérica: el Tajo, el Júcar, el Jiloca, el Turia o el Cabriel. 

 

26 de agosto de 2024

Pasarelas de Calomarde


Calomarde, el barranco de la Hoz y sus pasarelas

Salimos de València y en poco más de dos horas llegamos a Calomarde. Este pequeño municipio de 73 habitantes en 2023 se encuentra situado a los pies del Alto de la Piedra de 1.521 m y a orillas del Río de la Fuente del Berro. Aguas arriba, este arroyo excava un estrecho cañón por el que se han construido unas pasarelas que permiten atravesarlo y llegar andando hasta Frías de Albarracín. La ruta es muy bonita y de fácil acceso. Desde el punto de vista ornitológico el lugar más interesante son los cintos que rodean Calomarde, allí hay una buitrera donde además de 26 buitre leonado (Gyps fulvus), vimos águila calzada (Aquila pennata), avión común (Delichon urbicum), avión roquero (Ptyonoprogne rupestris), cernícalo vulgar (Falco tinnunculus), colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros), cuervo grande (Corvus corax), lavandera cascadeña (Motacilla cinérea), paloma bravía doméstica (Columba livia domestica) y petirrojo europeo (Erithacus rubecula).

 

Sima de Frías de Albarracín

Sima de Frías de Albarracín

Seguimos ruta por la A-1704, pasamos Frías de Albarracín y 3 km después de la localidad, a mano derecha fuimos a visitar la Sima de Frías. En un altozano boscoso cercano a la carretera, se abre un hundimiento del terreno de 80 metros de diámetro por 60 de profundidad, provocado por la disolución de la piedra caliza. 


Muérdago blanco (Viscum álbum)


Hay un sendero que permite rodear la depresión que discurre en el límite de un pinar donde destaca la presencia de muérdago blanco (Viscum álbum). Esta peculiaridad botánica se trata de una planta semiparásita que crece sobre las ramas de los árboles. Esta planta es protagonista de muchas tradiciones místicas, quizás porque tiene un proceso de reproducción curioso. Sus frutos son unas bayas que tienen una pulpa muy pegajosa que gusta a los túrdidos, sus semillas se les pegan y cuando las aves se posan en otras ramas y se limpian frotando el pico, depositan las semillas de la siguiente generación de muérdago. Desde la más remota antigüedad se consideró una planta sagrada que protegía los hogares, una rama en la puerta conseguía atrapar las malas energías con su pegamento y evitar que entraran en las casas. 


Anaptychia ciliaris


La humedad y la pureza de atmosfera permiten que las cortezas de los pinos se vistan con líquenes epifitos como la Anaptychia ciliaris, Mientras, en el cielo sobrevolaban los reyes de estas sierras, los buitres leonados.

 

Nacimiento río Tajo

El nacimiento del río Tajo

Lysandra coridon


De nuevo en la carretera, siguiendo hacia el oeste, subimos el Collado del Navazo con 1.622 m y en poco más de 4 km llegamos al nacimiento del Tajo. También está muy cerca de la A-1704, justo en el límite entre Aragón y Castilla La Mancha. En 1974 se instalaron unas esculturas metálicas de José Gonzalvo, que simbolizan al padre Tajo como un caballero con armadura y rodeado de las tres provincias que custodian su cuna, Teruel, Cuenca y Guadalajara. Cuando escribo esta crónica, sonrío recordando que unos motoristas guasones decían a plena voz: “Xé, eixe ès Mazinger Z”.


El Mazinguer Z del nacimiento del Tajo


Sorprende que un río tan importante a nivel ibérico porque es el más largo con 1.072 km, tenga una cuna tan humilde. Se trata de una pequeña laguna, junto a una fuente de aguas frías donde se solean ranas (Pelophylax perezi) y revolotean varias libélulas Lestes dryas, además de mariposas azuladas como la Lysandra coridon. 


Lestes dryas


Muy cerca de allí nace el río Cabriel, en el término de El Vallecillo y en años como este, especialmente seco, su cuna todavía es más sobria. En periodos lluviosos se produce la “Quebrantá”, cuando el agua mana por todas partes y llena el lecho del valle.

 

Nacimiento del río Cuervo

Nacimiento del río Cuervo.

Después de comer en Tragacete nos acercamos al monumento natural del Nacimiento del río Cuervo, en la Vega del Codorno. En medio de un bosque adulto de pino silvestre (Pinus sylvestris) con sus típicas cortezas de escamas rojizas en la parte alta de los enhiestos troncos serpentea un arroyo de aguas trasparentes donde revoloteaban varios ejemplares juveniles de petirrojo europeo (Erithacus rubecula).

 

Petirrojo europeo

Remontando la senda se llega a una cascada de piedra tobácea, tiene poca altura pero es muy ancha. Por ella resbala el agua entre musgos, briofitos del género Andreaeaceae que crean unas cortinillas con los pequeños chorros que ayudan a descomponer la luz y el verde intenso de los musgos de Syntrichia sp. Sin dudar se trata de un lugar de gran belleza aunque para poder apreciarlo conviene huir de las horas y jornadas más propicias al continuo trasiego de visitantes.

 

Cascada del Molino de la Chorrera, río Júcar

Cascada del Molino de la Chorrera

De regreso a Tragacete nos desviamos hasta la cascada del Molino de la Chorrera, que está pocos metros aguas abajo del nacimiento del río Júcar. Su cuna está en los manantiales del Estrecho del Diablo, también conocido como los Ojuelos de Valdeminguete. El Júcar es mucho más modesto que el río Tajo porque tiene solo 498 km de recorrido hasta su desembocadura en Cullera, pero llena de vida el centro del País Valencià.

 

Albarracín

27 de agosto de 2024

Albarracín

Después del desayuno recorrimos la villa de Albarracín que a pesar de su grandeza monumental, hoy solo tiene 1.015 vecinos según el censo del INE de 2023. En la Edad de Hierro fue la capital de una tribu celta, los lobetanos. Cerca de ella los romanos fundaron Lobetum y tallaron los cerros para abrir una conducción de agua que hoy en día tiene varios tramos visitables. En el siglo XI, en tiempos de la dominación islámica fue sede de uno de los reino de taifas. Su casco urbano medieval trepa desde la orilla del río Guadaliaviar, el que los valencianos llamamos Turia, hasta unas extensas murallas protegidas por diversos torreones que se alzan en las alturas del cerro. Las casas se arraciman unas encima de otras, solo separadas por estrechas callejas sarracenas. Un paseo tranquilo por ellas permite disfrutar de su peculiar arquitectura con una infinidad de rincones muy fotogénicos.

 

Barranco de Dos Aguas, Noguera de Albarracín

Robledal del barranco de Dos Aguas en Noguera de Albarracín

Esa mañana iniciamos la ruta saliendo dirección oeste, siguiendo la A-1512. Antes de llegar a Noguera de Albarracín tomamos la TE-V-9031 y seguimos 3 km hasta el prado donde nace el barranco de Dos Aguas, donde crece un robledal añoso. Un corto paseo nos permitió observar alondra totovía (Lullula arborea), arrendajo euroasiático (Garrulus glandarius), cuervo grande (Corvus corax), paloma torcaz (Columba palumbus) y papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca).


Ruta a la laguna del Cerritón, Bronchales
 

Laguna del Cerritón en Bronchales

De nuevo en la carretera seguimos hasta la entrada de Bronchales, allí nos desviamos por la A-2709 que gana altura serpenteando por un espectacular pinar adulto. Nada más pasar el camping que se encuentra a más altitud de España, con 1.727 m de altitud, se llega a una meseta boscosa. En el centro, en una ligera depresión se encuentra la laguna del Cerritón (1.750 m). El paraje está en medio del bosque y lo rodean picos como el Sierra Alta (1.854 m) al sureste, la Negraleda (1.765 m) y el Puntal del Caco (1.777 m) al sur, el Puntal del Hornillo (1.799 m) al suroeste, el cerro de los Toriles (1.806 m) y el Cerro de la Laguna (1.789 m) al norte. 


Laguna del Cerritón seca


Una primavera y un verano crudos la habían secado y solo quedaban unos pequeños charcos, aun así el paseo valió la pena. Pudimos observar carbonero garrapinos (Periparus ater), papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca), pinzón vulgar (Fringilla coelebs), reyezuelo sencillo (Regulus regulus) y trepador azul (Sitta europaea caesia).

 

Aguaspeñas, Checa

Aguaspeña, Checa

De nuevo en el coche continuamos hasta la localidad de Checa, sita en Guadalajara, en la comarca del Alto Tajo. Después de atravesar el pueblo, siguiendo 2 km por una pista se llega hasta Aguaspeña. Por una pequeña ladera cae agua procedente de un copioso manantial, sus aguas van saturadas de carbonato cálcico que al entrar en contacto con la atmósfera se deposita formando la toba calcárea. Esta roca con el paso de cientos o miles de años forma un edificio travertínico. Esta piedra es ligera y porosa, en su crecimiento impregna y petrifica los restos de vegetación que va cubriendo. La toba se cubre de musgo, de saxífraga dorada​ (Chrysosplenium oppositifolium) que con su vivo verde embellece las cortinas líquidas resbalan sobre ella. Allí mismo el agua fresca se acumula en una pequeña laguna rodeada de carrizal que en primavera debe albergar mucha biodiversidad.

 

Las Quebradas de Chequilla

Las Quebradas de Chequilla

De nuevo en la carretera siguiendo la CM-2111, nos desviamos por la GU-973 que nos acerca a la pequeña localidad de Chequilla. Poco antes de entrar sorprenden las Quebradas, unos torreones pétreos formados en el Triásico por areniscas y conglomerados rojizos, la erosión ha permitido que su roca más dura haya emergido de entre las calizas que la rodeaba. Algunas de las casas aprovechan estas enormes piedras de formas redondeadas para apoyarse, lo que lo convierte en un lugar muy singular e interesante, digno de acoger alguna producción cinematográfica.

 

Molino del Tajo, Peralejos de las Truchas

La Cascada del Molino del Tajo, Peralejos de las Truchas

Siguiendo la estrecha pista asfaltada GU-960, se llega a Peralejos de las Truchas, donde comimos en el restaurante Acebos del Tajos. Por la tarde bajamos a la Cascada del Molino que forma una antigua presa levantada para la generación de electricidad. Allí se disfruta de un río Tajo joven, lleno de vitalidad, con aguas puras, trasparentes que murmullan y brollan llenas de vida. Sorprende el color de sus aguas que podréis comprobar en las imágenes que acompañan esta crónica.

 

Molino de Alustante

Molino de Alustante

De regreso a Albarracín, buscando la carretera en mejor estado tropezamos con el sorprendente molino de Alustante. Su primera referencia data de 1860, pero en 1934 solo quedaban dos paredones en pie, finalmente en 2012 se reconstruyó.

 

Fuentes y referencias:

Cascada del Molino de Arriba, Peralejos de las Truchas:

https://alto-tajo.com/item/cascada-del-molino-de-arriba-peralejos/

El molino de Alustante:

https://alustante.com/molino-de-viento/

Las Quebradas de Chequilla:

https://www.caminodelcid.org/servicios/las-quebradas-de-chequilla-2716724/

Madoz, P. (1845-1850) “Diccionario geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar”. Vol. 11. Edición facsímil: Sánchez Zurro, D. (ed.). 1985, p. 126. Valladolid: DGA, Ámbito ediciones)]. https://tinyurl.com/2of6mewl

Reserva Natural Subterránea de Aguaspeña:

https://www.miteco.gob.es/es/agua/temas/delimitacion-y-restauracion-del-dominio-publico-hidraulico/catalogo-nacional-de-reservas-hidrologicas/informacion/tajo/aguaspena.html


Texto y fotos de Rafa Muñoz, 
Fons Fotogràfic RMiB