Papallacta, las montañas del colibrí. IV

 

Silfo de King, Long-tailed Sylph (Aglaiocercus kingii)/Arxiu RMiB

Termas de Papallacta, 30 de mayo de 2022

A 3.250 de altitud en un estrecho valle de la Cordillera Andina Oriental se encuentra la pequeña localidad de Papallacta (Tierra de papas). Este pueblo entró en los mapas en 1542 cuando Orellana bajó desde Quito liderando una expedición en busca de El Dorado. Siguió el valle de los ríos Papallacta y Coca para descubrir el Amazonas, bautizó este camino como la “Ruta de la Canela” que hoy cubre la carretera conocida como la Vía Interoceánica


Colibrí Colihabano, Buff-tailed Coronet (Boissonneaua flavescens)/Arxiu RMiB


Papallacta vive de las aguas termales que generan el volcán Cayambe al norte de la localidad y el Antisana, situado al sur. A pesar de la altitud estos valles gozan de una temperatura constante todo el año que ronda los 14°C, pero los cielos suelen estar cubiertos y provocan frecuentes lluvias, pero ningún aguacero impide tomar un buen baño caliente de aguas sulfurosas.


Colibrí Turmalina, Tourmaline Sunangel (Heliangelus exortis), macho y hembra/Arxiu RMiB


Al norte de Papallacta se encuentra el Parque Nacional Cayambe-Coca que cuenta con una extensión de 403.103 Ha. En la parte alta dominan los páramos de pajonal y pantanos, además hay 80 lagunas glaciares. Conforme se baja se adueña de las abruptas pendientes el bosque siempreverde montano alto, donde hay poco suelo fértil crece un matorral húmedo montano alto. En las zonas con menos desnivel aparece el bosque de neblina montano, el bosque siempreverde montano bajo y por último en las zonas más bajas domina el bosque siempreverde piemontano. 


Colibrí de Mulsant, White-bellied Woodstar (Chaetocercus mulsant)/Arxiu RMiB


Esa mañana mientras mis amigos se deleitan con otro baño termal, Paúl, Wilmer y yo subimos con el coche hasta la entrada del parque Cayambe-Coca y bajamos caminando los 5 km que lo separan de las termas. 

 

Colibrí Jaspeado, Speckled Hummingbird (Adelomyia melanogenys)/Arxiu RMiB

En la ruta destaca el agua que se descuelga en pequeñas cascadas por todas partes, tanta humedad mantiene una espesa vegetación de porte mediano, la altitud no debe permitir la presencia de árboles grandes. Como es habitual el cielo está gris ceniciento, amenaza lluvia y solo se oye algún pájaro escondido en la espesura. 


Colibrí Pechirrojo, Chestnut-breadsted Coronet (Boissonneaua matthewsii)/Arxiu RMiB
 

Con paciencia consigo observar escondidas en el matorral algunas aves y varios conejos andinos, Andean tapeti (Sylvilagus andinus). Solo se dejan fotografiar un colibrí turmalina, Tourmaline Sunangel (Heliangelus exortis) y un atlapetes nuquipálido, Pale-naped Bushfinch (Atlapetes pallidinucha).


Lista de aves en la carretera de Cayambe-Coca a Papallacta;  

https://ebird.org/spain/checklist/S115665727


Inca Acollarado, Collared Inca (Coeligena torquata)/Arxiu RMiB


Una vez reunido todo el grupo emprendemos camino dirección oeste, bajando por el valle. No tardamos en llegar al Guango Lodge. Este alojamiento está rodeado de una reserva de 300 Ha de bosque templado húmedo que está situado a 2.700 m de altitud. Está especializado en atraer colibrís a sus libaderos, lo frecuentan hasta 14 especies distintas que también aprovechan las orquídeas que crecen en sus exuberantes jardines. 


Inca Alihabano, Buff-winged Starfrontlet (Coeligena lutetiae)/Arxiu RMiB


Tiene varios espacios cubiertos diseñados para que los fotógrafos puedan acomodarse a resguardo de la lluvia, en ellos además de los bebederos dispone de cuidados posaderos que permiten hacer fotos espectaculares.


Jengibre de colmena (Zingiber spectabilis)/Arxiu RMiB


Uno de los senderos del alojamiento baja a las orillas de un impetuoso torrente de aguas bravas que frecuentan el pato torrentero, Torrent Duck (Merganetta armata) y el mirlo acuático coroniblanco, White-capped Dipper (Cinclus leucocephalus).


Metalura Tiria, Tyrian Metaltail (Metallura tyrianthina). Foto de Gerardo Aisa


 Lista de aves del Guango Lodge;

https://ebird.org/spain/checklist/S115677549


Conejo Andino, Andean tapeti (Sylvilagus andinus)/Arxiu RMiB


Seguimos ruta hasta Baeza para comer y en las calles observamos un grupo de chara verde, Green Jay (Cyanocorax yncas). Seguimos bajando para acercamos a la Amazonia donde pasaremos las tres noches siguientes, pero para continuar el lector tendrá que esperar a la próxima entrada.


Colibrí de Mulsant, White-bellied Woodstar (Chaetocercus mulsant)/Arxiu RMiB

Texto y fotos de Rafa Muñoz/Arxiu RMiB. Otros autores especificados en el pie Foto.

Los Andes centrales, Ecuador. III

 

Hicenda la Ciénaga/Arxiu RMiB

Hacienda la Ciénaga, Lasso, 28 de mayo de 2022

Amanecemos en la imponente casona construida a principios de 1700, fundada por el aragonés Matheo de la Escalera, originario de Lasquarri, una localidad de la Ribagorça. Sus descendientes  fueron caballeros de la Orden de Calatrava que se dedicaron a engrandecer esta propiedad señorial por donde han pasado todos los personajes históricos que han visitado Ecuador.

Este es un país pequeño que tiene una superficie de 256.370 km², poco más de la mitad de la España que cuenta con 505.944 km². En medio del territorio continental ecuatoriano se alzan los Andes, una enorme cordillera con picos cercanos a los 6.000 m. Por seguir con el símil ibérico, recordar que solo un puñado de nuestros picos peninsulares superan escasamente los 3.000 m. 


Parque Nacional del Cotopaxi/Arxiu RMiB


Los Andes parten el territorio continental ecuatoriano en tres grandes zonas biogeográficas: al oeste la costa del Pacífico, los Andes en el centro y el Amazonas en el este. A su vez la cordillera andina está dividida por un gran valle central, que se extiende de norte a sur. En 1802 este “callejón” rodeado de cumbres andinas lo bautizó Alexander von Humboldt como la “Avenida de los Volcanes”. 


Iliniza Sur 5.245 m./Arxiu RMiB


En la parte occidental de la cordillera se encuentran los volcanes Chimborazo (6.263 m), los picos gemelos: Illiniza Sur (5.245 m) e Illiniza Norte (5.126 m) o el Carihuairazo (5.018 m). En la parte oriental se alzan el Cotopaxi (5.897 m), Cayambe (5.790 m), Antisana (5.758 m), el Altar (5.319 m), Sangay (5.260 m) y el Tungurahua (5.023 m). La mayoría son volcanes activos que provocan una frecuente actividad sísmica y erupciones.

La finca de la Ciénaga está en medio de la llanura andina, aislada de los cultivos que le rodean por un bosque de añosos eucaliptos que se levantan más de 30 metros, justo enfrente del imponente volcán Cotopaxi. Como el valle central de los Andes está muy poblado ha sufrido una intensa deforestación, hace décadas que talaron todos los bosques autóctonos, hoy fuera de los parques nacionales solo quedan bosquetes con repoblaciones de pinos o eucaliptos alóctonos. 


Tangara naranjera, Blue-and-yellow Tanager (Pipraeidea bonariensis)/Arxiu RMiB


En mi ración de pajareo matinal encuentro algunas especies nuevas como el conirrostro cinéreo, Cinereus Conebill (Conirostrum cinereum), el colibrí metalura tiria, Tyrian Metaltail (Metallura tyrianthina) y la tangara naranjera, Blue-and-yellow Tanager (Pipraeidea bonariensis).

 

Lista de Hacienda la Ciénaga: https://ebird.org/checklist/S115465670

 

Mercado de Zumbagua/Arxiu RMiB


El resto de la jornada lo dedicamos a visitar un mercado indígena en Zumbagua. A la salida de la localidad paramos en un mirador para ver la Quebrada de Rumichaca y descubrimos una dormilona chica, Spot-billed Ground-Tyrant (Muscisaxicola maculirostris).


Laguna del Quilotoa/Arxiu RMiB


Posteriormente llegamos a un lugar otrora bello y ahora degradado por el turismo, la Laguna de Quilotoa. Algunos campesinos para ganar unos dólares venden “artesanías” de todo tipo o  utilizan unas pobres alpacas (Vicugna pacos) para hacer fotos a pesar que van acompañadas por sus retoños, a los que todavía deben amamantar. Conclusión: demasiada altitud, zona degrada por muchos chiringuitos llenos de gente, por tanto cero aves interesantes.

 

Colibrí rutilante, Sparking Violetear (Colibri coruscans)/Arxiu RMiB

Hacienda la Ciénaga, Lasso, 29 de mayo de 2022

La escapada matinal aporta algunas novedades como el birro grande, Streak-throated Bush-Tyrant (Myiotheretes striaticollis), el chochín montañés, Mountain Wren (Troglodytes solstitialis), el colibrí rutilante, Sparking Violetear (Colibri coruscans) y jilguero ventriamarillo, Lesser Goldfinch (Sporagra xanthogastra).

 

Lista de Hacienda la Ciénaga: https://ebird.org/checklist/S115466596

 

Arxiu RMiB


Ya todo el grupo en la furgoneta conducida por Wilmer nos dirigimos al Parque Nacional del Cotopaxi, ¡por fin podremos disfrutar de la fauna y floras andinas!

El parque se creó en 1975 para proteger un área de 33.393 Ha, se encuentra entre los 3.400 m y la cumbre del Cotopaxi que tiene 5.897 m. En la estación Mariscal Sucre hacemos una ruta por el Sendero Páramo que gana altura junto al cañón de Mishauaico


Andes Ecuatorianos/Arxiu RMiB

Estos llanos están dominados por pajunales de Calamagrostis y Cortadeira ssp, pero el camino también atraviesa un interesante bosquete de árbol de papel (Polylepis ssp) y un pinar. Sorprende la singularidad de la flora adaptada a este lugar extremo, destacan por sus formas o colores especies como una leguminosa, el choco de páramo o Lupinus pubescens, arbustos con inflorescencias rojizas como el Chuquiraga Jussieui, unas palmas con forma de pícea como la Loricaria thuyoides, hay varias especies de gencianas de flores muy llamativas como la Gentianella cerastioides, una bromelia andina como la Puya hamata o la Castilleja fissifolia con sus espectaculares brácteas rojizas.


Hemispingo cejudo, Superciliaris Hemispingus (Thlypopsis superciliaris)/Arxiu RMiB


Las aves a esta altitud no abundan pero son muy interesantes, encontramos caracara carunculado, Carunculated Caracara (Phalcoboenus carunculatus), hemispingo cejudo, Superciliaris Hemispingus (Thlypopsis superciliaris) y pitajo dorsipardo, Brown-backed Chat-Tyrant (Ochthoeca fumicolor).

 

Lista del Sendero el Páramo: https://ebird.org/checklist/S115483164

 

Vicuñas en el Cotopaxi/Arxiu RMiB

La altitud hace mella en nuestro caminar, las leves pendientes nos hacen jadear enseguida, no tardamos en llegar al coche para atravesar la puna (la tundra andina), allí encontramos los primeros grupos de elegantes vicuñas (Vicugna vicugna mensalis)


Avefría andina, Andean Lapwing (Vanellus resplendens)/Arxiu RMiB

Tras un breve desplazamiento llegamos a la Laguna de Limpiopungo que está llena de aves, destaca la abundancia de avefría andina, Andean Lapwing (Vanellus resplendens). Al acercarnos al agua aparecen anátidas como la cerceta andina, Andean Teal (Anas andium), el ánade maicero, Yellow-billed Pintail (Anas georgica), la focha andina, State-coloured Coot (Fulica ardesiaca) así como parejas de malvasía andina, Ruddy Duck (Oxyura jamaicensis andina) acompañadas de pollos pequeños, además de la espectacular gaviota andina, Andean Gull (Chroicocephalus serranus). ¡Estas aves son increíbles, gaviotas a más 4.000 m sobre el nivel del mar!


Remolinera ecuatoriana, Stout-billed Cincloides (Cinclodes excelsior)/Arxiu RMiB

Un paseo más pausado nos permite añadir delicatesen como el minero picudo, Slender-billed Miner (Geositta tenuirostris), el piojito gargantilla, White-throated Tyrannulet (Mecocerculus leucophrys) o la remolinera ecuatoriana, Stout-billed Cincloides (Cinclodes excelsior).

 

Lista de la laguna de Limpiopungo: https://ebird.org/checklist/S115483410

 

Lobo de páramo, Culpeo (Lycalopex culpaeus)/Arxiu RMiB

De nuevo en el vehículo intentamos llegar al Refugio José Rivas pero la niebla se cierra, se hace tarde y decidimos dar la vuelta, el destino nos recompensa, encontramos una raposa andina o lobo de páramo, Culpeo (Lycalopex culpaeus).


Yal plomizo, Plumbeus Sierra-finch (Phrygilus unicolor)/Arxiu RMiB

La furgoneta avanza despacio por la deteriorada pista, nos encaminamos a la entrada norte del parque hasta el Tambopaxi Lodge (Machachi) donde tenemos reservada la comida. Al llegar sacamos especies increíbles como el endémico colibrí del chimborazo, Ecuatorian Hillstar (Oreotrochilus chimborazo), el semillero colifajado, Band-tailed seedeater (Catamenia analis), el semillero paramero, el Páramo Seedeater (Catamenia homochroa) o el yal plomizo, Plumbeus Sierra-finch (Phrygilus unicolor)


Colibrí del chimborazo, Ecuatorian Hillstar (Oreotrochilus chimborazo)/Arxiu RMiB

El resto de la jornada realizamos un largo desplazamiento, abandonamos el valle andino para descender por la cordillera oriental hasta nuestro siguiente alojamiento, las Termas de Papallacta. 

Lista de Tombopaxi Lodge: https://ebird.org/checklist/S115484792


Semillero colifajado, Band-tailed seedeater (Catamenia analis)/Arxiu RMiB

Texto y fotos de Rafa Muñoz/Arxiu RMiB. Otros autores especificados en el pie Foto.

Mindo, paraíso de las aves. II

Tigana, Sunbittern (Eurypyga helias)/Arxiu RMiB

 

Quito, 26 de mayo de 2022

Es nuestro último amanecer en Quito, habrá que salir pronto por lo que solo tengo una hora para pajarear por los pequeños jardines que embellecen la piscina del hotel Marriott Quito. No tengo tiempo para descubrir muchas novedades, pero destaca la presencia de un colibrí gigante, Giant Hummingbird (Patagona gigas).


Jardines del Marriott Quito: https://ebird.org/checklist/S115323281

 

Platanero, Bananaquit (Coereba flaveola intermedia)/Arxiu RMiB

Atravesamos Quito siguiendo dirección norte antes que el tráfico se congestione con la hora punta. Seguimos la carretera 28 y abandonamos el valle central andino, trepando por la ladera norte del Macizo de los Pichinchas para subir hasta la localidad de Calacalí a 2.800 m. A partir de este punto se abandona el páramo de la región andina para dar paso a un estrecho valle fluvial. En sus empinadas laderas crece un cerrado bosque tropical nublado, para proteger esta selva húmeda se creó la Reserva Ecológica Mindo-Nambillo en 1988, que se extiende por 19.200 ha. 

El límite del bosque montano con el bosque húmedo lo marcan los pies de guarumo (Cecropia telenitida). Es un árbol que tiene anchas hojas digitadas de color blanquecino que contrastan con el follaje verde que domina el dosel de estos bosques impenetrables.


Ermitaño de Yaruqui, White-whiskered Hermit (Phaethornis yaruqui)/Arxiu RMiB

Tras dos horas de viaje por una sinuosa y bacheada carretera llegamos a San Carlos, un barrio de San Miguel de los Bancos. Nos dirigimos a una de las abundantes reservas privadas que se han creado porque en Mindo se observan hasta 550 especies de aves, por ello se ha convertido en una Meca para los ornitólogos de todo el mundo.


Amazilia de cola rufa, Rufous-tailed Hummingbird (Amazilia tzacatl)/Arxiu RMiB

El Punto Ornitológico Mindo se encuentra al final de una calle pedregosa, una puerta destartalada da paso a una torre observatorio, construida con bambú. Desde ella se domina un barranco por el que cae un arroyo que finaliza en una pequeña laguna, unos pocos metros más y se precipita al río Nambillo.


Tangara Goliplateada, Silver-throated Tanager (Tangara icterocephala)/Arxiu RMiB

Nos recibe Alcivar Saragosin, su apariencia podría ser la de un campesino más pero su menuda talla esconde a un increíble conocedor de las aves y sus costumbres, incluso habla a las aves y estas parecen entenderlo. Gestiona con mimo esta reserva que está llena de comederos de bananas que atraen un ejército de tangaras y libaderos de colibrís, nada más entrar tropiezas con decenas de aves que revolotean por todas partes. 


Colibrí Nuquiblanco, White-necked Jacobin (Florisuga mellivora)/Arxiu RMiB

Ante tal alud de estímulos simultáneos la cabeza del naturalista amenaza con explotar, no es capaz de decidir donde fijar la atención. Los pajareros estamos acostumbrados a dirigir nuestra atención al movimiento, pero aquí todo destella de color y rápidos movimientos. Pasados los primeros segundos de confusión decido parar, creo que será mejor intentar fotografiar la mayor cantidad  de especies para después intentar identificarlas. Mi consciencia logra centrarse y el humo se desplaza al disparador de cámara.


Tangara Dorada, Golden Tanager (Tangara arthus)/Arxiu RMiB


Alcivar casi tiene que arrastrarme para que abandone la plataforma, le seguimos bajando por un sendero empinado. Él señala y canta el nombre en inglés de cada especie que se cruza, son tantas que a la velocidad que lo hace solo puedo intentar apuntarlas en mi cuaderno de campo, el problema es que como no hablo inglés, escribo lo que entiendo. Sólo si una especie es grande y tranquila me permito el lujo de detenerme a observarla con los prismáticos, ello me hace perderme otras dos o tres aves. 


Nido con mínimos colibrís/Arxiu RMiB


Llegamos a la lagunilla y Saragosin nos señala un diminuto nido de colibrí del que asoman dos cabecitas que esperan la ceba, esperamos unos eternos segundos y como no aparecen los padres abandonamos el lugar. Unos metros después Alcivar nos coloca en semicírculo junto al charco, empieza a hablar entre dientes, más bien parece sisear palabras como: “bonita”, “preciosa”, “¿cómo estás?”. Entre la vegetación aparece una preciosa tigana, Sunbittern (Eurypyga helias). Lo increíble es que las letanías de Alcivar parecen tranquilizar la ardeida que se pasea por las orillas a escasos metros de 7 personas alucinadas. Nos cuenta que es uno de dos los pollos nacidos en la zona, la conoce desde polluelo y la visita todos los días para velar por su seguridad y bienestar. Los adultos y la hermana hace tiempo que se fueron pero ella ha preferido quedarse con Alcivar.

Elanio Tijereta, Swallow-tailed Kite (Elanoides forficatus)/Arxiu RMiB


Seguimos el recorrido para descubrir muchas más aves: elanio tijereta, Swallow-tailed Kite (Elanoides forficatus), cabezón cabecirrojo, Red-headed Barbet (Eubucco bourcierii), momoto Yeruvá Occidental, Rufous Motmot (Baryphthengus martii), titira enmascarado, Masked Tityra (Tityra semifasciata), tucán del Chocó, Choco Toucan (Ramphastos brevis) o tucanete culirrojo, Crimson-rumped Toucanet (Aulacorhynchus haematopygus), solo por citar las especies más grandes. Esa mañana conseguí fotografiar o apuntar en el cuaderno 50 especies, una cuantas más quedaron sin registrar. 


Arasarí Acollarado, Collared Araçari (Pteroglossus torquatus)/Arxiu RMiB
 

Lista del Punto Ornitológico Mindo;  https://ebird.org/checklist/S115324800


A medio día tienen sacarme a rastras del Punto Ornitológico Mindo, tenemos que ir a nuestro alojamiento porque tienen preparada la comida. En pocos minutos llegamos al Sisakuna Lodge, bajamos las maletas pero el shock pajarero está lejos de mitigarse. Tenemos una mesa preparada a la sombra de una terraza cubierta que está rodeada de un jardín lleno de orquídeas, bebederos de colibrí y comederos de tangaras. ¡Hay pájaros por todas partes! Una buena cerveza helada me hace entrar en razón, hay que parar, beber y comer un poco para recuperar fuerzas y dedicar todo el resto de la jornada a fotografiar aves.

  

Lista de Sisakuna Lodge; https://ebird.org/checklist/S115376693


Quetzal Cabecidorado, Golden-headed Quetzal (Pharomachrus auriceps)/Arxiu RMiB


San Carlos (Mindo), 27 de mayo de 2022

Después del éxtasis ornítico de la jornada anterior no me cuesta nada madrugar para salir a pajarear por los alrededores de San Carlos. Todavía es noche cerrada, paseo por las calles buscando un camino que me interne en el bosque, solo los ladridos de los perros parecen romper la tranquilidad. 


Helenor blue morpho (Morpho helenor)/Arxiu RMiB

Una calle llena de charcos deja atrás las últimas casas y parece internarse en el bosque, me acompañaba un perro joven que quiere demostrar que es un buen compañero de aventuras. Hasta que no sale el sol, todo está negro y silencio, las aves no se mueven. El camino llega a un torrente y detrás muere en una casona, he llegado al final de esa pista. Regreso caminando despacio intentando descubrir las avecillas que se mueven en los setos. Por destacar alguna señalar la presencia de un grupo familiar de semillero azul, Ecuatorian Seedeater (Amaurospiza aequatorialis).


Cabezón Cabecirrojo, Red-headed Barbet (Eubucco bourcierii)/Arxiu RMiB
 

San Carlos Mindo: https://ebird.org/checklist/S115415011


Después del desayuno ya junto a mis amigos vamos al Tarabita Cable Car. Cuelgan unas cestas de los cables de un teleférico que mueven gracias al motor de un coche y permiten al visitante elevarse por el dosel del bosque y subir una empinada ladera de donde salen varias rutas a diferentes cascadas. En el recorrido por el singular teleférico observamos las tres especies de carroñeros y el elanio tijereta.


Colibrí huérfano/Arxiu RMiB

En la parte alta del bosque sorprendo un espectacular Saltarín Alitorcido, Club-winged Manakin (Machaeropterus deliciosus). En la caseta del motor del segundo tramo del teleférico tienen entre algodones un diminuto pollo de colibrí que alguien encontró en el suelo del camino. Lo alimentan con agua azucarada gracias a un cuentagotas minúsculo, completan su dieta con alguna arañita que devoraba con gula el pajarillo. El pollo ya ha logrado sobrevivir una semana, ¡Suerte pequeñín!


Tangara Carafuego, Flame-faced Tanager (Tangara parzudakii)/Arxiu RMiB

 

Tarabita Cable Car: https://ebird.org/checklist/S115415447


La jornada continua con una visita a Mariposas de Mindo, es un mariposario que permite disfrutar de algunos de los lepidópteros más llamativos que hay en el trópico. Destacaban especies como el Morpho helenor, pero hay otras muchas: Heliconius cydno, Heliconius erato, Heliconius hecale, Heliconius melpomene, Heliconius timareta, Hypothyris ninoniaMarpesia marcella


Bastón de emperador (Etlingera elatior)/Arxiu RMiB

Regresamos a comer al Sisakuna Lodge y recoger las maletas, aún tenemos tiempo para disfrutar de un mosquerito silbón, Southern Beardless-Tyrannulet (Camptostoma obsoletum). Por la tarde debemos deshacer camino para regresar al valle central de los Andes, pero nos aún nos espera otro atracón de aves, la visita al Alambi Reserve


Tucanete Culirrojo, Crimson-rumped Toucanet (Aulacorhynchus haematopygus)/Arxiu RMiB
 

En el valle de Tandayapa hay un alojamiento rural en medio de un bosque primario del Chocó. Allí Fabián Luna ha montado comederos de tangaras y bebederos a los que acuden hasta 30 especies de colibrís diferentes, además suele frecuentarlo el quetzal, sin duda es un lugar imprescindible para cualquier ornitólogo. Mejor que intentar describir la explosión de biodiversidad con la que gozamos en Alambi, repasar la lista de aves y algunas de las fotos eBird.


Carpintero Alidorado, Golden-olive Woodpecker (Colaptes rubiginosus)/Arxiu RMiB
 

Alambi Reserve: https://ebird.org/checklist/S115417412

 

Tangara Cabeciazul, Blue-necked Tanager (Tangara cyanicollis)/Arxiu RMiB

Extasiados después del atracón de aves en Mindo nos encaminamos hasta nuestro siguiente alojamiento, la hacienda la Ciénaga, una antigua casona colonial a los pies del Cotopaxi.


Inca Pardo, Brown Inca (Coeligena wilsoni)


Entre colibrís en el Punto Ornitológico Mindo

Texto y fotos de Rafa Muñoz/Arxiu RMiB. Otros autores especificados en el pie Foto.

Aves de Quito, Ecuador. I

 

Chingolo común, Rufous-collared Sparrow (Zonotrichia capensis)/Arxiu RMiB


ECUADOR Y GALÁPAGOS I

Hay veces que los astros se alinean y los vientos del destino te brindan una oportunidad única. Una anodina mañana de invierno recibes la llamada de un amigo que dice: “es mi sueño, es el momento y quiero que lo compartas conmigo”. Cuando se presenta una oportunidad como esa, y eres lo suficientemente viejo para ser consciente que el tiempo ha pasado muy rápido y que debes exprimir el que te quede con intensidad. Ese día no tienes ninguna duda, sin dudar te apuntas a vivir una nueva aventura: Ecuador y Galápagos.


Quito/Arxiu RMiB

Quito, 24 de mayo de 2022

Amanece en las puertas de la terminal del Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre, el vuelo ha sido cómodo y tranquilo, pero demasiado largo. Paradoja de los husos horarios es que embarcamos en Barajas a la 1:45 y después de 10 largas horas de vuelo, son las 6 de la mañana. Mientras esperamos que nos recoja la furgoneta de nuestro guía, un grupo de chingolos comunes, Rufous-collared Sparrow (Zonotrichia capensis) corretean alrededor de las maletas.

La capital de Ecuador, San Francisco de Quito, está situada a una altitud media de 2.850 msnm, se desparrama en el centro de un enorme valle abierto en medio de los Andes. Los tres millones de habitantes que viven en su área metropolitana levantan los barrios humildes en los empinados cerros, para el centro de la ciudad dejan las mejores tierras, una planicie delimitada por profundas gargantas fluviales.

Nos alojamos en un moderno hotel del norte de la capital, el JW Marriott Quito. Después de dejar las maletas y darnos una ducha esperamos el regreso de nuestro guía en los pequeños jardines de la entrada, durante unos segundos revisa las flores del parterre un espectacular colibrí colilargo menor, Green-tailed Trainbearer (Lesbia nuna).


Quito/Arxiu RMiB

A media mañana nos deja la furgoneta de la agencia GASTON-SACAZE ECUADOR en un cerro coronado por una gran estatua kitsch, la Virgen del Panecillo, desde allí se domina todo el centro histórico de la ciudad. El cambio horario y la altitud provocan un zumbido en mi cabeza que me aísla del exterior, más corteses, mis compañeros y amigos: Maica, Gerardo y Aurelio simulan prestar atención a las explicaciones nuestro guía, Paúl Urigüen. Con gran delicadeza se esfuerza intentando que reparemos en la belleza de la arquitectura colonial, yo centro la poca lucidez que conservo buscando sin éxito un pájaro que canta en la copa de un eucalipto. Poco después compruebo que ni siquiera soy capaz de enfocar los prismáticos sobre alguna de las golondrinas barranqueras, Blue-and-white Swallow (Pygochelidon cyanoleuca) que revolotean por la zona, por tanto desisto de buscar más aves en la capital andina y me concentro en seguir caminando. 


Quito/Arxiu RMiB

Nuestro guía nos arrastra gracias a su español dulce, nos cuenta mil detalles de lo que nos rodea, por suerte nosotros solo tenemos centrarnos en intentar bajar empinadas calles adoquinadas. Conseguimos arrastrar los pies hasta la plaza Grande y la encontramos abarrotada por grupos de campesinos vestidos de domingo, parecen somnolientos y se apiñan bajo la sombra, la nota de color la aportan banderolas y pancartas de cartulina que llevan. Unas pantallas gigantes vomitan un discurso ininteligible del presidente Guillermo Alberto Santiago Lasso Mendoza, pero nadie parece prestar atención.

Se conmemora la victoria en la batalla de Pichincha (1822) que significó la derrota de las tropas coloniales y la expulsión de los españoles de toda la Real Audiencia de Quito. Aún tuvieron que esperar ocho años más para desvincularse de la Gran Colombia y proclamar la independencia de la República de Ecuador


Quito/Arxiu RMiB

Este país es el resultado de un puzle geográfico que ocupan 36 etnias tranquilas, gentes orgullosas y trabajadoras, acostumbradas a ver pasar conquistadores belicosos, los penúltimos fueron los incas y los ecuatorianos ayudaron a los castellanos a destronarlos. 

Podemos huir de la concentración cívica y refugiarnos en la tranquilidad del claustro del Convento de San Francisco. Allí desaparece mi jet lag cuando descubro un colibrí rutilante, Sparking Violetear (Colibri coruscans) y una paloma, la zenaida torcaza, Eared Dove (Zenaida auriculata) que se dejan fotografiar, una de las ventajas de las abundantes endorfinas que genera el pajareo.


Colibrí rutilante, Sparking Violetear (Colibri coruscans)/Arxiu RMiB 
 

Listado aves observadas: https://ebird.org/spain/checklist/S115313223

 

Zenaida torcaza, Eared Dove (Zenaida auriculata)/Arxiu RMiB 


Quito, 25 de mayo de 2022

Aún no ha amanecido, son las 5.30, camino solo hasta el cercano parque de la Carolina. Al llegar me sorprende encontrar un cuidado parque idéntico al de cualquier ciudad europea. Por sus viales corren los deportistas, otros madrugadores más tranquilos pasean sus perros, el resto se dirige a cumplir con sus obligaciones cotidianas. Ante las advertencias sobre los frecuentes hurtos, llevo escondida la cámara y prismáticos en un sencillo macuto pero en ningún momento tengo sensación de peligro.


Tangara azuleja, Blue-grey Tanager (Thraupis episcopus)/Arxiu RMiB

Las aves no tardan en aparecer, en el suelo abundan los grupos familiares de mirlo grande, Great Thrush (Turdus fuscater) y de paloma montaraz común, White-tipped Dove (Leptotila verreauxi). En las copas de los árboles la abundante es la tangara azuleja, Blue-grey Tanager (Thraupis episcopus).

Compruebo que lo más productivo es prestar atención a las flores, en las arboledas junto a un gran lago encuentro colibrís como el calzadito colilargo norteño, Sapphire-vented Puffleg (Eriocnemis luciani) o el colibrí colilargo mayor, Black-tailed Trainbearer (Lesbia victoriae). Las flores de un arbusto me permiten descubrir dos pinchaflor negro, Black Flowerpiercer (Diglossa humeralis).


Pinchaflor negro, Black Flowerpiercer (Diglossa humeralis)/Arxiu RMiB


Con paciencia entre las copas se deja ver el jilguero encapuchado, Hooded Siskin (Sporagra magellanica) o algún llamativo macho de mosquero cardenal, Vermilion Flycatcher (Pyrocephalus rubinus).

Los típicos gritos histéricos de un pícido delatan el fugaz vuelo de un carpintero candela común, Crimson-mantled Woodpecker (Colaptes rivolii). Entre mirlos negros y marrones descubro un sinsonte tropical, Tropical Kingbird (Mimus gilvus), vestido de un elegante gris. Cuando inicio el regreso para llegar al desayuno una hembra de halcón peregrino, Peregrine Falcon (Falco peregrinus cassini) me regala con un intento de caza, picando sobre un mirlo joven.


Museo Intiñan, Quito/Arxiu RMiB


A mis amigos les gusta la naturaleza tanto como la historia, el arte, la gastronomía o el conocer otras culturas, por tanto este no será un viaje “pajarero”, pero intentaré que vean mucha biodiversidad. 

La jornada la completamos con la visita al insulso complejo turístico de Mitad del Mundo, es un pastiche de cartón piedra que pretende explotar la línea del ecuador geográfico y la historia de las expediciones científicas que lo estudiaron. Mucho más didáctico e interesante es el cercano Museo Solar Intiñan, allí ya levantaban casas los Quitu, un pueblo anterior a los Cañari que ayudaron a los conquistadores españoles a derrotar a los Incas. Dentro observamos el primer picogrueso ventriamarillo, Golden-bellied Grosbeak (Pheucticus chrysogaster) del viaje.


Listado aves observadas: https://ebird.org/spain/checklist/S115314993


Mosquero cardenal, Vermilion Flycatcher (Pyrocephalus rubinus)/Arxiu RMiB