28.05.09
Con la escusa de visitar a una amiga que se encuentra trabajando en SPEA ( Sociedad Portuguesa para el Estudio de las Aves) he pasado desde el 20 al 26 de mayo en la isla de Maderia pajareando, que por cierto es una isla preciosa. El primer día teníamos previsto visitar las islas Desertas, hacer uno de los censos de aves pelágicas, pero por temporal no pudimos ir, una pena porque es donde se albergan la mayor parte de cría de estas especies, y una de las pocas aunque reducida población de foca monje (Monachus monachus). Cambiando de planes nos dirigimos a la montaña a verificar en una cuadricula si se confirmaba la presencia de la galinhola o bécada (Scolopax rusticola) como conocemos todos, con el fin de realizar en un futuro un proyecto de mejora, detectando un ejemplar en vuelo, más tarde bajamos a la costa donde han colocado unos focos de iluminación en un puente y ver el impacto sobre las pardelas cenicientas (Calonectris diomedea) que llegan al anochecer ya que algunas veces caen al suelo y no pueden alzar el vuelo por si solas, me comentaba mi amiga.
También me quería llevar a la zona donde cría la petrel freira (Pterodroma madeira) cerca del pico Arielo a 1818 mts de altura hacer una escucha donde ellos hacen el seguimiento pero como era fuera de horas de trabajo y no tenían pendiente hacerlo en los días que estuve no pude, ya que de ser así hay que pedir permisos con antelación.
En los canales para recoger agua o Levadas como se denominan en Portugal puede observar las diferentes especies de la isla siendo casi todas subespecies, algunas son difícilmente ver a simple vista las diferencias aunque otras si se dejaron ver bien y poder ver perfectamente las diferencias, como los pinzones vulgares (Fringila coelebs maderensis) que te cogían comida de la propia mano.
Ya el ultimo día por la tarde pude acompañarle en uno de esos viajes en catamarán de turistas para ver cetáceos que aprovechan para hacer censos de aves marinas y pude ver además de las aves que después comentare, un grupo de unos 20 delfines comunes (Delphinus delphis), un cachalote (Physeter macrocephalus) y una tortuga boba (Caretta caretta) espectacular sin duda alguna.
Las aves que pude observar en esos días fueron:
Jilguero (Carduelis carduelis parva).
Gorrión común (Passer domesticus).
Mirlo (Turdus merula cabrerae).
Garceta común (Egretta garceta).
Pinzón vulgar (Fringila coelebs madeirensis).
Canario (Serinus canaria).
Lavandera cascadeña (Motacilla cinerea schmitzi).
Curruca capirotada (Sylvia atricapilla heineken).
Bisbita caminero (Anthus berthelotii madeirensis).
Petirrojo (Erithacus rubecula rubecula).
Vencejo unicolor (Apus unicolor).
Vencejo pálido (Apus pallidus brehmorum).
Golondrina común (Hirundo rustica).
Avión común (Delichon urbica).
Codorniz (Coturnix coturnix confisa).
Paloma de Madeira (Columba trocaz).
Reyezuelo listado (Regulus madeirensis).
Lechuza (Tyto alba schmitzi).
Cernicalo vulgar (Falco tinunculus canariensis).
Ratonero (Buteo buteo harterti).
Gaviota patiamarilla (Larus cachinnans atlantis).
Vuelvepiedras (Arenaria interpres).
Charrán común (Sterna hirundo).
Pardela cenicienta (Calonectris diomedea).
Pardela pichoneta (Puffinus puffinus).
Petrel de bulwer (Bulweria bulwerii).
Mensaje de Toni Pérez en el FORO SVO Aves
Foto de Toni Pérez, FONS FOTOGRÀFIC SVO
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